Steve Jobs ha ofrecido este viernes una esperadísima conferencia en la que se ha disculpado en nombre de Apple por el mal funcionamiento del iPhone 4, su último modelo de telefonía inteligente. Para él, los problemas de recepción no son una cuestión que justifique la retirada del mercado y sustitución del iPhone 4, con más de tres millones de ejemplares vendidos desde el día que salió a la calle, el 24 de julio. Y como solución para el problema de la antena, ha anunciado la entrega de fundas gratis para aliviar el problema de que al agarrar el teléfono se bloquee aquélla. A pesar del arrepentimiento que ha presentado por el mal funcionamieto de su creación, nada ha dicho de los dispositivos con el sensor táctil defectuoso o con aquellos que tenían manchas amarillas en la pantalla y que también han provocado múltiples protestas.
Jobs llegó a decir hace unas semanas que la culpa de que los usuarios tuvieran problemas de cobertura era de ellos mismos, que cogían mal el teléfono y tapaban la antena al realizar las llamadas; incluso, se atrevió a grabar un vídeo donde explicaba cómo había que tomar el aparato, y en el que también aconsejaba que los usuarios compraran una funda protectora. Una grabación que no hizo sino aumentar las protestas de los compradores. Ahora, Jobs ha reconocido plenamente que los problemas vienen de la antena (de cuyo diseño ha dicho estar «bastante contento») y ha vuelto a ofrecer la misma solución.
Para Steve Jobs, su empresa realmente sólo habría fallado con el algoritmo de la señal del iPhone 4. Error que no ha impedido a Jobs calificar al cuestionado teléfono como el mejor producto dentro de toda la ilustre y multimillonaria historia de Apple.
A todos aquellos previsores que ya se hayan comprado las fundas de goma modelo «bumper» se les devolverá su coste, 29 dólares o 22,4 euros al cambio. La asociación de consumidores Consumer Reports ya había indicado que el nuevo iPhone no merece su recomendación y ha insistido en que Apple tiene la obligación de compensar debidamente a los usuarios del defectuoso teléfono.
A modo de ofensiva defensiva, Steve Jobs ha dejado saber que se están exagerando de forma increíble los problemas del iPhone 4, ya que otros sofisticados teléfonos móviles de la competencia también presentan exactamente el mismo problema de inadvertido bloqueo de llamadas con la mano, empezando por los modelos BlackBerry Bold 9700, Droid Eris y el Samsung Omnia II.
Apple apenas ha recibido quejas
Jobs ha ofrecido datos que contrastan con la multitud de voces discrepantes que se han escuchado estos días sobre sus productos. Según el CEO de Apple, tan solo el 0,55% de los usuarios del iPhone 4 (es decir, cinco de cada mil) se han quejado sobre problemas de recepción de llamadas, y un 2 por ciento han llegado a devolver el nuevo teléfono. Para él, las informaciones que medios de comunicación y blogs han publicado estos días han sobrepasado, como las reclamaciones de los usuarios unos límites: «Esto ha sido inflado hasta la exageración. Es increíble.»
Con una actitud que para muchos podría considerarse como descarada, Jobs ha justificado los fallos en el iPhone diciendo que «la vida es así»: «Muchos teléfonos inteligentes que probabámos se comportaban de esta manera. No somos perfectos y nuestros teléfonos inteligentes tampoco. Esto es un reto para toda la industria». Y si esto pudiera parecer poco, ha añadido que la mayoría de los compradores del iPhone 4 creen «que es la cosa más chula que nunca han tenido en propiedad».
En su intervención, Steve Jobs también recurrió al factor envidia para explicar el actual predicamento de Apple: «Me parece que forma parte de la naturaleza humana que cuando existen grandes empresas, se quiere despedazarlas. Veo lo que está pasando con Google. Veo a toda esa gente tratando de despedazar a Google, cuando se trata de una gran compañía que ha invertido en todas esas cosas que nos encanta utilizar».
Por otra parte, h a prometido que reembolsará el dinero de todos aquellos iPhones que hayan salido defectuosos, hasta el próximo 30 de septiembre. Le ha faltado arrodillarse para mostrar su avergonzamiento por la situación: «Pido disculpas a todos aquellos que hayan tenido problemas con el iPhone», ha llegado a decir.
Los periodistas allí congregados han aprovechado la ocasión para preguntar al CEO de la empresa de la manzana por su estado de salud (se retiró de la vida pública para tratarse un cáncer). «Estoy bien», ha sido su escueta respuesta.
Autores: josé manuel blanco/pedro rodríguez / madrid/washington
Fuente: abc.es
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